En 1967 Van Morrison graba Brown Eyed Girl.
Una cualidad para definir la música creada por el genio de Belfast sería su capacidad para evadirnos de todo a través de ella.
Una personalísima voz fundida con impecables melodías creadas a partir del blues, el gospel, el rock, la música celta, el country, el soul y por supuesto el jazz, hacen de él, uno de los artistas y compositores más aclamados desde que apareciera con sus bellos temas en la década de los 60.
George Ivan Morrison crecía en Belfast aprendiendo a tocar la guitarra y el saxo hasta que se incorporó en 1964 al grupo “Them” del que formaría parte durante dos años dando lugar a temas inolvidables como “Gloria”, contando con la producción de Bert Berns. Pero fue un año después de la disolución de la banda cuando firma con Banga Records y así el 28 de Marzo de 1967 graba 8 canciones en Nueva York contando de nuevo, después de más de una pelea, con Bert. El resultado de su breve reconciliación y de la primera sesión sería el nacimiento de la canción “Brown Eyed girl”. Tema que dedicaba a una chica de ojos marrones con la que cantaba en días lluviosos y con la que volvía a encontrarse. "Yo no sé nada sobre letras. Las cazo al vuelo, sin más. En realidad, yo sólo trabajo con palabras cuando escribo la canción. Luego las libero. Y, cuando canto, canto sílabas; signos, frases. Ni siquiera sé si consigo que conecten los sonidos y los significados". Con este tema alcanzó los primeros puestos en las listas americanas editándose rápidamente, en el mes de julio de ese mismo año, el álbum “Blowin´Your mind” algo que él no aprobó, ni su edición, ni su título, ni la portada. A pesar de ello, todos sus discos, todas sus canciones desde este “Chica de ojos marrones”, están considerados por la crítica como piezas clave de la música contemporánea.